viernes, 30 de enero de 2015

El conejazo

Me despierta el paso de los tractores, pero paso de levantarme, voy a esperar un poco más. Bueno, yo creo que es la hora. Ya pongo la proa apuntando para el sur. El GPS sólo me sirve de brújula, porque no tiene nada de cartografía de aquí; mejor, a mi me gusta tirar de mapa. Hay todo tipo de animales. Se me cruzan zorros, liebres, pájaros que no he visto nunca y hasta un armadillo, que no me ha dado tiempo de sacarle una foto.

Cuchillo-Có - foto web Municipal -
Después de más de 100 km llego a Cuchillo-Có, que es donde supuestamente hay nafta; 400 km y sin poner reserva, esto es una máquina. Veo un surtidor, pero no tiene y me indican otro sitio.
Llego a otro surtidor más antiguo y aparece un chaval. Le digo lleno y se mete en una caseta, luego sale y empieza a charlar conmigo: de dónde vienes, a donde vas... Hasta que entra otra vez y sale con una garrafa de 10 l. luego la misma operación y saca otra.
Con el depósito lleno salgo hacia Choele Choel. La pista parecida, pero con más tramos de arena, en los que pego un par de patadas al suelo y veo las estrellas, a la tercera me manda para casa, es lo que tiene tener las rodillas como un viejo de 50 años. Así que me relajo un poquito y más suave. Sigo para alante y me sale a interceptar una especie de conejo enorme, del tamaño de un pitbull o más, una pasada!. Yo a 100 por hora por la rodera del ripio, medio curva, no puedo tocar el freno, ni salirme del carrilillo, me la pego!, me la pego!... Cuando el bicho está a la altura de la rueda delantera, nos miramos, yo con un ojo le miro a él y otro la pista. El me mira con el ojazo ese, no sé quién tiene más miedo, y él, con más capacidad de maniobra, cambia de trayectoria en el último cm. De la que nos hemos librado los dos!.
 
Choele Choel - foto Google -
Después de más de 5 horas de pista llego a Choele Choel a repostar y me encuentro con un brasileño con una GS 1200, que también va para Ushuaia. Le digo que yo también voy, pero por las pistas, y él me dice que no, porque nunca a hecho campo. Y que su moto es muy grande; la verdad es que si da un poco pereza, meterse con esa moto por la arena. Cuando tienes que remar, entre las culatas y las maletas, vas dando pasitos como Pedro Picapiedra, cuando juega a boliche.

Esto lo digo desde el cariño. Un saludo para los Gseros. Que yo también lo he sufrido en silencio. Me despido de él y le digo a ver si se anima, pero no. Y me voy a comer al pueblo. ¿A que no sabéis qué? La milaaneesaa!!. Comiendo y charlando con el posadero, al final me dice que si me quedo. Le digo que igual si, que tiene buena pinta el pueblo y me dice que hay un camping que es gratis. ¿Gratis? pues algo que es gratis, hay que aprovecharlo. Voy para allá y de gratis nada, así que arranco para donde me lleve la ruta, que todavía es pronto. Hago otros 200 km con 100 de pista, que ha sido la más solitaria del viaje. En un momento, paro a beber agua, porque creo que mi sombra me ha saludado. No había nadie, en otras por lo menos ves la entrada de algún rancho… aquí nada. Me parece que hoy me toca dormir con los pumas, que me han dicho que hay muchos, pero no atacan.
La Pampa - foto Google -
Por fin llego a un pueblo de 5 familias y planto la carpa en una especie de campo de futbol. Y claro, todo el pueblo a mí alrededor. Por fin, llega el Jefe, que me trae una garrafa de agua congelada, y después de charlar un rato, me dice que vaya a su casa a dormir; pero ya tengo la carpa montada con todo dentro. Así que mañana, me tomaré un mate con él.
29-01-2015

La Tecnología al servicio de la Aventura

Hola a todos, soy Wenceslao; para los que no me conocéis, soy el Administrador de este Blog y el que se encarga de editar y publicar todo el material que Juan me manda por distintos medios, desde donde se encuentre. En esta ocasión, os escribo para hablaros del sistema SPOT.
Este sistema es un gran aliado para Juan en esta aventura, proporcionándole una seguridad necesaria, al viajar solo. Se trata básicamente de un sistema de localización GPS vía satélite. El sistema tiene varias funciones, pero en el caso de Juan, dos son las más relevantes: la seguridad y el seguimiento. La seguridad es el motivo principal de contar con este sistema. En caso de un accidente grave, emergencia o situación de peligro, con sólo pulsar un botón, el sistema se pone en contacto con un Centro de Emergencias, que contactará con las autoridades locales, dando la localización exacta por coordenadas GPS, y enviará la asistencia o equipos de rescate necesarios. La otra función, más lúdica, es el seguimiento. Dado que el sistema va dejando unos puntos de paso cada cierto tiempo, es posible trazar un track del recorrido bastante aproximado, que nos permite ver por dónde va viajando de una forma bastante exacta. Accediendo a este enlace, podréis entrar en el sitio web donde se van plasmando estos puntos de paso:
http://share.findmespot.com/shared/faces/viewspots.jsp?glId=0KhjZLJbG0xqTzaEqS2q5db0eQhimqUCv
Para los que os guste enredar un poco, veréis que se puede cambiar la imagen de mapa a satélite y viceversa. También se pueden ver detalles de los puntos de paso, como la fecha y la hora; atención, la hora indicada es la hora local del que lo está visionando, no es la hora local de Argentina. Además, acercando el zoom, en algunos sitios podéis arrastrar el hombrecito que sale encima de la herramienta zoom, a la izquierda de la pantalla, y ponerlo en el sitio (sólo cuando lo marca en azul), obteniendo una imagen real del lugar, sobre la que se puede girar, avanzar y hacer zoom. Así, podréis ver en muchos casos, el lugar exacto por donde ha pasado. A modo de ejemplo, os pongo esta imagen que he sacado de la carretera que nos comentaba en su crónica del otro día, la RN 3 al sur de Buenos Aires.
RN 3 - foto Google -
Si queréis más detalles e información del sistema Spot, podéis hacerlo pinchando aquí.
Nada más por el momento; esperamos que el Blog, aparte de informar de cómo le va a Juan, os resulte entretenido e interesante.
Gracias por seguirnos.

jueves, 29 de enero de 2015

La Pampa

Qué bien he dormido!. Yo creo que el mejor día. Lo único había algo que se movía debajo de mi carpa. Por si acaso no me he salido mucho de la esterilla. Además he tenido buenos guardianes.


Los belgas, tampoco son de madrugar. Estoy desayunando en el pueblo a las 11 menos 20, y ahí pasan, pero ellos van para el norte.

Aquí parece que no se ha inventado la señal de dirección prohibida, porque no hay ninguna; a veces me meto en dirección contraria hasta que me avisan. Pero no sé cómo lo sabrán ellos, debe haber algún truco. Ya me enteraré.

Hace menos calor y está nublado, parece que va a llover. Empiezo por la RN 3, pero es un poco aburrida y hay bastante tránsito, así que voy a improvisar. Giro para el oeste para bajar más por el interior. Hay mucho menos transito, se va prácticamente sólo. Incluso hago unos 200 km por carreteras de tierra, que me da vidilla. ¡Como acelera la zarigüeya!. Me “engorilo” un poco, hasta que pienso que aún me queda mucho y a ver si la lío el segundo día, ahora suave, je, je.

Se me está haciendo tarde y sólo he comido un bocata guarro de gasolinera; no veo muchos sitios para parar. Me parece que hoy toca acampada libre, pero me gustaría cenar algo. Voy mirando a ver donde podría poner la carpa. Está todo cercado por el ganado y hay algunas entraditas para los ranchos; igual aprovecho alguna, pero quiero cenar. Ya está el sol muy bajo y veo un desvío a un pueblo. Ahí tiene que haber algo. Si señor, hay una especie de tallercito que dan de comer; pues para adentro, que éste es la última oportunidad. Me zampo la típica milanesa, que es un escalope que puede ser en bocata o no, y una ensalada. Además, está justo a la entrada de la pista que tengo que cojer mañana, que tira para el sur, aunque no tengo mucha gasolina. Pero el posadero me dice, que aquí hay un hombre que vende en garrafas, pero se le ha acabado; que tendrá para mañana a la tarde, pero cómo a medio camino suelen vender. Habrá que probar.

La Pampa - foto Google -
Ya es de noche, así que acampo a la salida de la aldea, al lado de una pileta, en la que se bañan los críos.

Se está bien aquí, ya estoy en la Pampa.
28-01-2015

miércoles, 28 de enero de 2015

Por fin !

Ala! Otra vez el paseíllo. Pero hoy cojo un bus que me deja un poco más cerca. Llego al depósito y ahí está la zarigüeya. Un poco escorada, mirándome con esos dos ojos, yo creo que tiene más ganas que yo de salir de ahí.
 
 
Abro los grifos, tiro del starter, giro la llave, qué tensión!, arrancará?. Aprieto el botón unos segundos, bien, ¡tiene batería! y en cuanto se llenan los carburadores, empieza a pedorrear y Olee!, ahí está, en marcha!. Me encaramo en ella... ¡Ya estoy en casa!.
Abre que salgo!. Me voy para el hotel, que tengo los trastos. Qué bien se va!. Me pongo la ropa de moto y voy a ver si me hacen una llave. Voy a un par de ferreterías y nada, que de moto no hacen. Pues voy a tener que cuidarla cómo si fuera mía.
Pues me voy de aquí que hace un calor con esta ropa, terrible. Ya miraré más adelante en Chile, que son los reyes de la ferretería.
Me cuesta un poco salir de Bs As, y cómo no quiero ir por autopista, me meto en encerronas, paso por pueblos del extrarradio, con calles de tierra como laberintos, sin ninguna indicación, pero muy curiosos. Así que opto por la autopista, que además es muy barata. Estoy en la mítica RN 3 que baja hasta Ushuaia. El paisaje es totalmente llano, verde amarillento, y yo creo que algo pantanoso, con muchos rebaños de vacas. Pero no importa, se va de miedo. Ya no hace tanto calor, que no es que no haga, pero el verde siempre refresca algo.
 
Tenemos un poco de viento de cola y la zarigüeya quiere revoluciones, pero yo le aguanto, que ya tiene una edad... Hay algunos peajes, es una carretera normal, pero las motos no pagan. Paro a comer en una tasca y pido una "milanesa", que es un bocata de carne con lechuga y tomate, y una Coca Cola. Cuidado al decir grande!, jodé! parecen del centro de Bilbao!. Con esto y 2 plátanos, ya tiro todo el día, la coca cola litro y medio y el bocata, una barra grande.
Sigo por la 3. Tengo ganas de valaska y pivo. De carpa y cerveza. He hecho casi 400 km y el entorno no cambia. Entonces es cuando llego a un pueblo muy veraniego, Azul se llama, y tiene camping municipal, así que ahí voy. Está chulo y curiosito.
 

Estoy a lo mío y llegan 2 rastafaris en dos motillos chinas. Son belgas, uno habla perfectamente español. Han comprado las motos en Chile y están haciendo más o menos lo mismo que yo, pero al revés. Me preguntan a ver si hace más calor en Bs As que aquí. Aquí hace frío, les digo. Y se han quedado con un poco de cara rara.
 

A cenar un poquito y a la carpa, que se tiene que estar de escándalo, sin oír ruidos de coches, ni sirenas, ni gente, ni el camión de la basura...

¡Qué bueno!. Ya es de noche, me doy la vuela y veo algo moverse, ¡un ratón!; que va, es un sapo, ¡se está llenando el camping de sapos!, ¡está plagado!, pero completamente lleno. No van a salir en las fotos, pero es impresionante.

27-01-2015

martes, 27 de enero de 2015

Esto en Es... PAÑA! si pasa

No he dormido mucho. Yo creo que por el mate; para mí que tiene mateína o algo así. Eso sí, el ungüento ese que me dio Isabel, no sé si será casualidad, pero me ha aliviado mucho. Habrá que hacer 6 pruebas para hacer un patrón. Mira que soy eh....
Pues habrá que ir a buscar la moto. Cojo el bus que lleva a Avellaneda, está a unos 30 km cálculo yo, porque tarda un poco más de una hora. Pero me deja en tomar por saco. Me dice el chofer que tengo una buena caminata hasta la calle Salta.
Comienzo a caminar por una avenida larguísima, con un calor inhumano, hasta que encuentro la calle Salta. Tengo que ir al número 1212 y estoy en el 60!
A todo esto he dejado las cosas el hotel, porque no hubiera llegado con los trastos. Pues sigo andando por esta calle, que no da ninguna confianza, pero no me importa, tendrán que venir muchos o con pistola, porque tengo un rebote...
Me gotea la nariz, los dedos, las orejas, empapado de sudor, los pies escocidos, vamos, si me pagaran por esto no lo hacía.
UNA GASOLINERA!! Entro y me meto un zumo de pomelo, tipo "Caparra", alguno ya me entiende. Estoy un ratito cerrando los poros con el A.A. y sigo mi camino hasta que encuentro el depósito. Me ha llevado cómo 2 horas.

Entro y esta Aldo, un jubilado Argentino-Español esperando una BMW K 1200 Lt… Charlamos un rato y vamos a verificar las motos; y no os lo imagináis...
Noo! eso no, los de Mudinmar en Es..PAÑA! no han mandado mis llaves! Ó-LÉ!! Ó-LÉ!!  ME DA ALGOO!!  A QUIEN MATOO!!
Y lo peor de todo es que lo sabía. Había estado comentando con Aldo, que seguro que mi moto estaba sin llaves. Yo ya vi la movida allí en Valencia, todo el mundo se quería ir a comer... que donde están mis llaves... que si las tiene Fulano que luego viene...
Lo malo es que las copias las tengo en el hotel en la chaqueta. A todo esto, la verificación no vale porque tiene que venir otro tío. Ala!, a buscar al otro tío!...eso sí, el ambiente era bueno.
 
El caso es que Aldo me llevaría en su moto hasta el hotel y luego tendría que venir en bus otra vez. Pero ya es muy tarde, y no me recomiendan andar por el barrio tarde; la verdad no tiene muy buena pinta y cómo tampoco voy a salir de noche... Pues otro día más en Bs As. Esto es como "El día de la marmota".
Así que me vengo con Aldo al hotel. Pero no sin antes cortar el candado, para poder coger el casco; ésta es otra. Lo que les ha costado entenderlo.

Ya me deja Aldo en el hotel, y ese paseíto de 30 km en su moto, es lo mejor de todo el viaje. Qué maravilla!. Qué bien se está con el casco puesto!. Y no tengo que andar!. Sin exagerar, yo creo que en km habré subido un par de veces al Aconcagua.
Son más de las 6 y no he comido. Para que voy a pensar. Al Burger King. La hamburguesa, coca cola y patatas más grandes que tengas. Pa dentro como si nada. Ahora al hotel a tumbarme hasta mañana.
Si quieres aventura. Trae una moto a Argentina. No hace falta más. No te digo lo que tiene que ser traerla de vuelta. Con eso ya tienes para un par de meses de puro entretenimiento.
Y me voy a por agua que tengo sed.

lunes, 26 de enero de 2015

El paseillo

Bueno, pues yo creo que sólo me queda el paseíllo; mañana espero este sentado en la Zarigüeya y empezar a tragar millas. Tenía un recorrido marcado, pero he estado mirando el mapa y estoy por cambiarlo. Iba a bajar por la costa, pero igual me apetece más por el interior; supongo que habrá menos turistas y menos tránsito también.
Eso hoy, mañana ya veremos.
Digo mañana, dando por hecho que me van a dar la moto, como no sea así me va a dar la lumbalgia otra vez, o hasta hemorroides.
Si alguien está preocupado por mi pantalón, tranki que ya lo he lavado 2 veces. Cada vez tiene un color más raro, pero limpio.
 

Hoy he quedado a comer con Isabel para despedirme. Hace un calor infernal, cojo el colectivo para ir al barrio-pueblo de Isabel, Vicente López, que está a una hora más o menos. Me bajo en una zona residencial mucho más elegante que lo que he visto hasta ahora. Encuentro su portal fácilmente, pero no sé el piso. Esto me pasa por no leer los mensajes hasta el final. Después de esperar un rato para ver si se asomaba, me decido a empezar a llamar a todos los timbres y a la quinta llamada, es la única que me responde.
 
 
 
 
 
Después de pasar el día comiendo en un restaurante a la orilla del río de La Plata, me lleva a ver El Tigre, otro pueblo que está en el estuario del río. Es una zona de esparcimiento, con un canal, barcos turísticos, un paseo con terrazas y hasta aquapark.



De vuelta en su casa, me invita a un mate; por fin tomo mate!. Tiene un sabor bastante fuerte. Vemos algo de información en el ordenador, y me da un bote con un bálsamo que dice es milagroso para los dolores. Yo soy un poco escéptico con estas cosas, pero lo acepto y lo probaré.


Y ahora al bus otra vez y para el hotel.

Después de otro paseíto importante, pues me bajo del bus demasiado pronto, por fin en el hotel empapado de sudor. Me tumbo en la cama y mañana escribo. Esto del turismo urbano es muy duro.

domingo, 25 de enero de 2015

Una pausa para publicidad

                                                                                                                                                           


Pues eso, más de lo mismo.


Paseo, comer, paseo, siesta, paseo, cenar. No hay mucho más.

 
 
 
 
Además, me siento cómo "recalentao" de estar aquí encerrado. No sólo por el calor, que también. Es cómo un "recalentao" insano. Es como estar en un atasco con un motor refrigerado por aire, que va, pero como raro. Con el ralentí disparado.

En cuanto me den la moto, que espero sea el lunes, salgo zumbando para donde sea, a la hora que sea...

Y ahora, Wences, pon los anuncios. Que no me viene la Musa...

sábado, 24 de enero de 2015

Y sigo...

Hoy no tengo muchas ganas de escribir. Yo creo que los días que faltan  para que me den la moto, van a ser un poco sosos. No me apetece hacer más turismo. A parte que lo esencial, lo he visto todo.

Me dijeron que hoy abrían el contenedor. A ver si me cuentan algo.
Por lo pronto me voy a comer al "Cortijo", en el otro barrio que estuve, que tiene más gracia, además se come bien y barato, y de paso me doy un paseo.
Jode, ¡qué calor hace! y ¡qué sed me han dado los macarrones con estofado!
Pues parece que tengo noticias.
El lunes a las dos de la tarde, tengo que ir al depósito fiscal a ver si está todo bien; y supongo que me dejarán marchar con la moto. Así que espero que sólo me quede el finde para estar aquí. Yo creo que aguantaré.

viernes, 23 de enero de 2015

Cómo lo pasamos!

Otro día más… esto es un sin vivir. A ver qué hago hoy. Primero a ponerme ciego a desayunar, luego no sé, porque aquí no hay muchas obras para ir a ver; igual voy a echar pan a las palomas o algo así.
Voy a la farmacia a ver si me dan algo para el dolor, que sólo faltaría que no me pueda subir en la moto. Mecaguen...

Que me suban entre cuatro, me pongan tercera, y salgo zumbando. Qué muy bonito Bs As, pero esto ya es mucho.

Sobredosis de voltarén y a ver que pasa.

Aquí estoy, mirando al techo en Stand By para que pasen las horas, que ya es lo único que quiero. Esto lo aprendí en las fuerzas armadas, para pasar las interminables horas en formación y en el cuerpo de guardia.

Ya parece que hace efecto la drogaína.

 
Ya no me queda mucho que ver aquí, aparte que no tengo muchas ganas...  Quiero irmeeee!.
 
Así que voy a dar un paseíto, por un parque que hay por aquí cerca. Voy a comprar algo de cenar en el súper y a correr.








Ya vale por hoy.

jueves, 22 de enero de 2015

La Boca

Hoy me he levantado con una lumbalgia bastante fuerte. Yo creo que por tanta tensión; tengo un dolor importante, pero habrá que aguantarse.

No tengo ninguna noticia de HUB. Así que voy a ponerme ciego en el desayuno y voy a ir al famoso barrio de La Boca.

Ya en el bus, me doy cuenta que en cuanto pasamos la frontera de la ciudad, que es la autovía que la rodea, cambia el entorno y ya sólo quedamos 2 personas. La verdad, es que para ser una ciudad de ocho millones de habitantes, no hay mucha gente por la calle.

Le pregunto al chofer si estamos en La Boca:

-Sí, a dónde quieres ir?
-Pues a lo típico, a donde van los turistas
-Bien, pues te paro aquí y tiras para la derecha de la avenida, nunca para la izquierda
-Porqué?, le pregunto
-Porque en el otro lado están los nenes malos, te afanan.

Qué bueno!. Pues para la derecha, que no quiero que me atraquen, aunque tampoco se iban a llevar mucho.

Y por fin llego. No me extraña que no hubiera nadie por la calle. Han venido todos en bus. Turistas pa regalar. Buses y buses.

 
Me doy una vuelta. Esto hubiera estado guapo en los 40, ahora está chulo, pero un poco prostituido de chiringuitos que venden mierdas para los turistas. Pero de algo hay que vivir.
 
 
 
 
 
 
 
Así y con todo eso, está chulo.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
  
 
 
 
Me como un chorizo criollo, 2 pavos, me tomo una birra, 4,5 pavos, no está mal; y marcho para el hotel, que me duele la chepa y a ver si tengo alguna noticia.

















Que va nada de nada.....

miércoles, 21 de enero de 2015

Atrapado en Buenos Aires

Hoy toca cambiar de hostel. Estaba bien este, buen precio, la gente amable y una zona chula con callejuelas para pasear curiosas. Así que cojo los bártulos y a caminar. Este otro por lo que veo, está en una zona más pija, tipo Indautxu. Por consiguiente, precios más altos. Allí ya me había buscado unos sitios para comer barato y bien.
A veces parece que mi viaje consiste en esto, dar vueltas por Bs As sin más ni más. Tipo Chiloé. Luego me acuerdo... ah no!, si yo he venido a hacer un viaje en moto...


Tampoco estoy tan mal. Aunque es una ciudad grande, es bastante manejable. Es fácil reorientarse y el sistema de buses es bastante bueno. Pensaba que me iba a agobiar más, porque las ciudades grandes me sobrepasan, pero parece que hay menos gente que en Bilbao.

 
 
 
 
Estoy cerca del famoso cementerio de Recoleta así que habrá que verlo, ya que estamos.


















Ya he estado y bueno... está bien, pero no deja de ser un cementerio con panteones de lujo. Cuidadín, que el de Getxo también tiene lo suyo. Eso si, está de turistas hasta arriba, lo explotan bien con guías turísticos y todo. Pues eso, ahí tenéis el cementerio de Recoleta y a ver si mañana os enseño la "Boca", el barrio quiero decir. Que os habíais pensao!!